Seguramente si te diriges a la cocina y echas un vistazo a las especias, podrás encontrar laurel, como la gran mayoría de los mexicanos. Porque, aunque esta planta es originaria del mediterráneo, los mexicanos la hemos adoptado y actualmente es ingrediente fundamental en una gran cantidad de platillos.
En la antigua Grecia, los guerreros y emperadores más reconocidos, eran venerados con coronas de laurel, tal como lo hemos visto en películas y series de televisión.
El laurel es una especia bastante provechosa, aporta a nuestro cuerpo una gran cantidad de Calcio y potasio, además de hierro, vitamina B1, B2 y B3. Es un excelente antiinflamatorio, gracias a su gran contenido de eugenol y un gran humectante, ya que posee un aceite rico en antioxidantes, vitaminas y minerales, su uso tópico puede favorecer la apariencia de la piel.
Gastronómicamente el laurel es muy apreciado, sus hojas se pueden utilizar enteras o molidas, pero en el 100 % de las ocasiones se utilizan secas, ya que las hojas del laurel no es recomendable consumirlas frescas. Es un ingrediente clave en la cocina mediterránea y como mencionamos anteriormente, también en la cocina mexicana, aportando un aroma y sabor único a los platillos.